NUESTRO MANIFIESTO

Be Human. Be Planet. Be B.

Fue Albert Einstein quien dijo que locura es hacer lo mismo esperando resultados diferentes. 

Llevamos muchos años haciendo lo mismo. En los últimos siglos la economía ha crecido de manera exponencial, llevando esperanza y progreso a millones de personas. Pero lo ha hecho a costa del medioambiente y de las comunidades más vulnerables. La brecha entre pobres y ricos es más acuciada que nunca. Hoy 62 personas poseen la misma riqueza que 3600 millones. Cada año consumimos casi el doble de los recursos que el planeta tiene para ofrecer y el calentamiento global y la contaminación de los mares amenazan con acabar con la vida tal y como la conocemos. El modelo que instauramos hoy se ha vuelto insostenible. Ha llegado el momento de activar el plan B.

Desde el movimiento B Corp proponemos utilizar la fuerza de las empresas como motor de cambio. Para bien o para mal vivimos en una sociedad que se rige por parámetros económicos, y las empresas son las responsables del 82% de la generación de riqueza en el mundo. Resulta impensable una transformación real que no pase por transformarlas a ellas.

Las empresas B Corp hemos comprendido que ningún proyecto resulta viable si no toma en cuenta el modo en que afecta a las personas y al medioambiente. Y la razón es muy simple: ningún negocio puede funcionar en un planeta que se extingue. Formamos parte de un ecosistema social, económico y medioambiental al que no podemos dañar sin dañarnos a nosotros. Llegó el momento de entender que si algo nos beneficia, pero perjudica al mundo, entonces no nos beneficia.

Las empresas B Corp propugnamos una transformación sistémica que posibilite la creación de una economía más justa, más inclusiva y más regenerativa. Una que mire hacia el futuro con ilusión y con esperanza y que permita a las futuras generaciones proyectarse en él. Cada cual desde su lugar debe tomar conciencia del impacto que sus acciones provocan en el entorno. Como personas que trabajan, invierten y compran, debemos preguntarnos, frente a cada decisión cotidiana, si estamos ayudando a solucionar o a agravar los problemas. Como líderes empresariales también. Ya no se trata de querer ser las mejores empresas del mundo, sino de intentar ser las mejores empresas para el mundo.

El uso responsable de los recursos naturales, el respeto por las personas y por la vida, la revisión de nuestras políticas y de nuestras alianzas, la transparencia en nuestros procesos y en nuestros resultados. No estamos proponiendo un cambio en las reglas de juego. Es que el juego ya ha cambiado. Cada día, en todo el mundo, hay millones de personas que están alineando sus decisiones con el tipo de sociedad que quieren construir. El voto no se ejerce cada cuatro años en las urnas. El voto se ejerce con cada decisión que tomamos. Llevamos muchos años haciendo lo mismo y los resultados están a la vista. Ha llegado el momento de convertirnos en el cambio que queremos protagonizar. Por las personas. Por el planeta. Por nosotros mismos. Be human. Be planet. Be B.